Tras presentaros nuestro calendario de salidas, estrenamos la temporada de viajes con todo un destino de leyenda: Canfranc. El 13 de enero, y durante todo el fin de semana, nos uniremos a nuestros amigos de AZAFT para hacer el “Tren Blanco” que han organizado entre Zaragoza y la estación internacional, hoy reconvertida en hotel de 5 estrellas. Será una nueva oportunidad para todos aquellos que no pudisteis venir el pasado mes de mayo, ¡y esta vez en pleno invierno!
Nuestro tren -formado por la 333-107 y tres coches del “Tren de los Ochenta”- saldrá el viernes 13 a las 16:30 de la estación de Madrid-Chamartín para encaminarse por la línea 200 hacia Zaragoza, haciendo paradas para recoger viajeros en Alcalá de Henares y Guadalajara. Rendiremos viaje en la estación de Casetas, continuando nuestros acompañantes en cercanías -cuyo billete se incluye en el precio del viaje- hasta Zaragoza-Delicias, desde donde podrán dirigirse a los hoteles escogidos para pernoctar. Para quienes así lo deseen, la Asociación ha concertado un precio especial con el hotel Eurostars Zaragoza****, situado en la propia estación de Delicias y que incluye un desayuno tipo buffet.
Al día siguiente, una vez acoplada nuestra composición al “Tren Azul” de AZAFT, partiremos hacia los Pirineos sin prisa pero sin pausa en un viaje con un enorme sabor ferroviario y donde nuestra 333-107 se empleará a fondo, sobre todo en el tramo entre Jaca y Canfranc, subiendo 368 metros en poco menos de 25 km con rampas de hasta 23 milésimas. En el trayecto podremos disfrutar de la naturaleza incomparable del Pirineo nevado, y ya en Canfranc, contemplaremos el majestuoso edificio de la estación internacional, recientemente rehabilitado y reconvertido en hotel.
En nuestro destino, los viajeros tendrán tiempo libre para pasear por la estación y Canfranc Pueblo y descubrir las distintas rutas y senderos. En la oficina de turismo de Canfranc podremos reservar un paseo en raquetas o una visita guiada a la estación. También podremos visitar el centro A Lurte con reserva previa. Para los esquiadores más avezados hay un autobús que desde Canfranc Estación que os puede subir a las pistas de Candanchú o Astún para hacer una jornada de tarde en la que disfrutar de la montaña. En los restaurantes de la zona repondremos fuerzas antes de regresar a Zaragoza y descansar en el hotel.
El domingo 15 tendremos tiempo libre para visitar Zaragoza antes de regresar al tren, que a las 16:35 efectuará salida de la estación de Delicias para llegar a Chamartín aproximadamente a las 21h.
Ya están a la venta los billetes, ¿de verdad te vas a perder esta aventura? ¡Anímate y acompáñanos en un viaje sin igual!
La estación internacional de Canfranc
Dada su cercanía a la frontera con Francia, la localidad de Canfranc ha ejercido históricamente una gran importancia estratégica y militar, siendo notable las instalaciones militares de la Torreta de Fusileros o el Fuerte de Coll de Ladrones. Sin embargo, la estación internacional de Canfranc es el edificio insignia de este pueblo pirenaico.
En 1915 quedó inaugurado el túnel entre ambos países y en 1923 se comenzó la construcción de la estación con objeto de convertirse en el centro neurálgico en la conexión transfronteriza. Inaugurada el 18 de julio de 1928, es un bellísimo ejemplo de la arquitectura industrial de la época y está dotada de una elegancia sorprendente.
Durante la II Guerra Mundial, fue lugar donde los oficiales de las SS y de la Gestapo trasladaban el oro nazi y también fue puerta de entrada para los judíos fugitivos de la Europa ocupada por el nazismo. Por ello, la estación internacional de tren de Canfranc, conocida también como el ‘Titanic’ de los Pirineos, es fuente de muchos y variados relatos.
El tráfico internacional se interrumpiría tras el accidente producido el 27 de marzo de 1970 cuando un tren de mercancías francés descarriló en el puente de L’Estanguet a consecuencia del cual se derrumbó y el gobierno francés nunca lo reconstruiría. Esto generó una caída drástica del tráfico e inició una etapa de decadencia que perdura hasta la actualidad.
Hoy en día, tras varios años de obras, el noble edificio de la estación se ha visto sometido a una completa renovación, acogiendo el Canfranc Estación Royal Hideaway Hotel 5*. En el entorno, los distintos tinglados y naves se han ido adaptando a nuevos usos, destacando el Centro de Peregrinos o el nuevo edificio de la estación ferroviaria, así como la placa giratoria donde se ubicará el la futura sede del Museo ferroviario aragonés y que cuenta con parte de la rica colección de material remolcado conservada por AZAFT.
